Ubuntu Linux dejó atrás el soporte a equipos de 32 bits en junio de 2019, una decisión que arrastró a docenas de distribuciones basadas en ella (como Linux Mint, Elementary OS, Zorin OS o KDE Neon) a hacer lo mismo. Otras distribuciones, como Arch Linux o Fedora, han tomado la misma decisión.
El problema es que las compañías tecnológicas consideran obsoletos a los equipos de 32 bits frente a los de 64, y estiman además que su decreciente uso no justifica el esfuerzo que comporta mantener dos ramas de la misma distribución.
Pero esta postura, comprensible cuando hablamos de Windows o Mac, se antoja incomprensible para muchos usuarios de Linux, que siempre han podido confiar en este sistema operativo para 'resucitar' sus antiguos equipos.
Por fortuna, todavía hay muchas distribuciones comprometidas con el hardware de 32 bits y a las que podemos seguir recurriendo si necesitamos hacerlo funcionar.
Debian
Debian es conocida por ser la 'distribución madre' de Ubuntu y por mantener, al contrario de esta última, su apuesta por funcionar en una amplia gama de plataformas de hardware.
Y eso incluye por ahora a los Intel de 32 bits: su última versión estable (Debian 10 'Buster') ofrece soporte para este hardware hasta 2024.
¿Qué decir de Debian? Se trata de una de las distribuciones Liux más versátiles, y en un clásico para los veteranos del software libre.
Devuan
En 2015, una profunda polémica sacudió a la comunidad Debian: el cambio del tradicional sistema de inicio 'Init' por el nuevo 'Systemd', al que muchos acusaban de ser inseguro y violar la filosofía de diseño de Unix.
Por eso, dos años más tarde se presentaba Devuan (pronunciado como 'Dev One'), un fork de Debian apegado al 'Init', y que por lo demás no ofrece grandes cambios con respecto a Debian.
Slax
Slax es una distribución actualmente basada en Debian (antes de eso lo estuvo en Slackware, de ahí su nombre), y que está pensada para ejecutarse desde unidades removibles, desde DVDs a discos USB.
Esto último lo convierte en una opción muy recomendable para hacer funcionar equipos antiguos únicamente para tareas puntuales.
Para ejecutar su entorno de escritorio Fluxbox sólo requiere de un procesador i686 (los primeros datan de 1995) y de 128 MB de RAM (512 si vamos a usar el navegador web).
Emmabuntüs
Emmabuntüs es otra distribución cuyo nombre también desvela que ha cambiado de distribución base: nacida en 2012 sobre la base de Ubuntu, pasó a depender de Xubuntu primero y de Debian más tarde.
Emmabuntüs no requiere de Internet para completar su instalación, porque todos los paquetes requeridos se incluyen dentro de su ISO. Eso también facilita su uso como distribución 'Live'.
Esta distribución nació en el seno de las comunidades Emaús, para facilitar el reacondicionamiento de equipos informáticos obsoletos en el marco de iniciativas de cooperación y desarrollo.
Fuente: https://www.genbeta.com/linux/siete-distribuciones-linux-para-hacer-funcionar-tu-ordenador-32-bits