
El problema es grave, sobre todo si se tiene en cuenta que el nuevo producto de Netscape -una división del gigante de las comunicaciones Time Warner America Online- está especialmente diseñado para proteger a los internautas de los ciber-timos como el “phishing”, la práctica de suplantar páginas web para captar información sensible de los internautas.
El nuevo Netscape trata de recuperar algo del lustro que tuvo en su día y desafiar al Internet Explorer de Microsoft, aquejado de numerosos problemas de seguridad.
El navegador se ajusta automáticamente dependiendo de la “peligrosidad” de la página web en que el internauta esté en cada momento, de manera que supuestamente es capaz de evitar los timos más frecuentes.
Sin duda no es buen inicio de este nuveo navegador que se quiere poner a la altura del Firefox.
El futuro determinará por cual de los navegadores el usuario final adoptará, pero el tema esta que todos exigen seguridad ni internet explorer, ni firefox han complacido del todo a los internautas.