
La idea es que el nuevo borrador de la GPLv3 incluya los incisos necesarios para impedir este tipo de acuerdos, e indirectamente, impedir que Novell siga “vendiendo” su distribución de Linux, Novell SUSE Enterprise Desktop y Server.
La FSF, además, pretende usar esto como una forma de advertir a otras empresas que no cometan el error de firmar acuerdos con Microsoft.Eben Moglen, consejero general de la fundación, comentó:
"La comunidad hará todo lo posible por interferir con este acuerdo y con cualquiera como éste. Tienen toda la razón de estar preocupados, porque éste es el principio de una gran agresión de patentes de parte de Microsoft. Sí la FSF se opone al acuerdo, y estamos pensando qué hacer. Pronto tendremos una nueva versión de la GPLv3″.
Según Moglen, los más críticos quieren que se prohíba a Novell distribuir nuevas versiones de software Linux. Moglen dice que el Consejo de la fundación no ha decidido todavía sobre este asunto pero cree que se anunciará una posición de consenso en unas semanas. Si la fundación decide actuar, la prohibición podría aplicarse a las nuevas versiones de Linux que podrían venir con un acuerdo de licencia a partir de marzo.
John Dragoon, vicepresidente y responsable de marketing de Novell no quiso comentar nada todavía, alegando que aún es prematuro hablar de cómo la prohibición podría afectar a la compañía.